El Gobierno presume de «modernizar España» reduciendo la semana máxima de 40 a 37,5 horas sin recorte salarial. La medida, gestada en el Ministerio de Trabajo y avalada ayer por el Consejo de Ministros, afrontará su primer debate parlamentario en julio. Patronales, Banco de España y pymes alertan de un encarecimiento salarial inmediato y de una pérdida de competitividad que golpeará sobre todo a los sectores presenciales. Radiografiamos la reforma, los números que esconden sus defensores y los escenarios que se abren para la economía real.
Panorama en tres líneas
- 12 M de trabajadores verán reducida su jornada antes del 1 de enero de 2026, según Trabajo.
- 5.099 M€ de impacto anual sólo en hostelería por menor facturación y costes extra.
- CEOE avisa: “Vuelta de tuerca que lastra empleo y salarios futuros”.
Cómo llegamos hasta aquí
La rebaja figura en el pacto de coalición entre PSOE y Sumar. Tras meses de bloqueo, el Consejo de Ministros aprobó ayer el proyecto de ley y lo remitirá al Congreso con la vista puesta en un pleno extraordinario de julio. A falta de los cuatro votos de Junts, la ministra Yolanda Díaz confía en sacarlo adelante antes de agosto.
Anatomía de la reforma
- Entrada en vigor: de forma progresiva: 38,5 h en octubre 2025 y 37,5 h en enero 2026.
- Registro horario reforzado y derecho a la desconexión digital, con multas de hasta 200.000 € a las empresas reincidentes.
- Compensaciones a pymes: posible fondo de bonificaciones aún sin cuantificar tras el veto de CEOE en la mesa de diálogo.
Números que inquietan a la empresa
La patronal cifra el incremento directo de costes salariales en un 6 % —sin productividad añadida— y advierte de unos 2.538 M€ extra sólo para hostelería y turismo. El Banco de España avisa: reducir horas sin ganar eficiencia «mermará el PIB per cápita».
Quién aplaude, quién teme
— Sindicalistas y encuestas
Ocho de cada diez españoles ven con buenos ojos la medida; el apoyo sube al 83 % entre todos los consultados y al 72 % incluso entre votantes de Junts.
— Empresarios y autónomos
CEOE y CEPYME denuncian “improvisación legislativa” y avisan de despidos si no se vincula la rebaja a productividad.
— El supervisor financiero
El Banco de España pide “cautela” y recuerda que España todavía arrastra una brecha de productividad del 7 % respecto a la eurozona.
Lo que no te cuentan
1. Elasticidad salarial inversa. Con la masa salarial fija y menos horas trabajadas, el coste/hora aumenta un 6 %; la pyme podrá responder congelando sueldos futuros o subiendo precios. Ambos caminos restan poder adquisitivo real al trabajador, justo lo contrario del relato oficial.
2. Fiscalidad silenciosa. Los nuevos registros horarios requerirán software homologado y auditorías externas: un negocio que ya estiman en 300 M€ anuales en consultoría y licencias que, de nuevo, pagará la empresa… o el cliente.
3. Desincronización con Europa. Ningún país del Eurogrupo ha bajado de 38 h semanales sin atar la medida a productividad o flexibilidad interna; Alemania, de hecho, estudia ampliar jornada para sostener cotizaciones.
Lo que viene ahora
Si la ley supera el trámite de julio, el sector privado tendrá seis meses para adaptar turnos, sistemas de fichaje y convenios. Las grandes empresas podrán absorber el golpe ajustando bonus y teletrabajo; las micropymes afrontarán la enésima subida de costes en plena ralentización del consumo. El resultado —menor empleo neto o aumento de precios— pondrá a prueba la narrativa gubernamental justo antes de la campaña autonómica vasco-gallega de 2026.
Fechas a marcar en rojo
- 17 jul 2025: pleno extraordinario en el Congreso para la votación final del proyecto.
- Oct 2025: entrada en vigor de las 38,5 h y registro horario reforzado.
- 1 ene 2026: jornada máxima legal fijada en 37,5 h.
Redacción Derechista — 11 de junio de 2025